Hablamos con Juan Etchegaray, fundador de GROW – una escuela de internet creada en 2017 –, sobre la revolución digital, la pandemia y cómo estos dos fenómenos están tan relacionados, sobre todo cuando hablamos de cómo afectan a las PYMES y los emprendimientos.

Por: @beluprieto / fotos: unsplash


No hace falta aclarar que la pandemia nos afectó a todos en varios aspectos, ni tampoco decir que claramente nadie estaba preparado para lo que un virus de transmisión mundial iba a significar.

En la Argentina – y, en realidad, en el mundo – las pequeñas empresas y los emprendimientos, cuyos dueños estaban acostumbrados al intercambio en persona – e incluso muchos confiaban su éxito en ese tipo de interacción – se vieron afectados también. Y gracias a la obligatoriedad inicial del aislamiento, debieron adaptarse. El que no lo hizo, probablemente sufrió las consecuencias.

La adaptación que debieron hacer implicó aggiornarse a la revolución digital que viene tomando el mundo rápidamente y adoptar las herramientas de las redes sociales. 

Juan Etchegaray, director general de GROW, nos contó su opinión sobre el impacto de la pandemia en las PYMES y los emprendimientos. 

Desde GROW, una escuela de internet fundada en 2017, Juan y su equipo justamente se encargan de ayudar a transitar la transformación digital de la mejor manera. Es evidente que no existe mejor persona para contarnos un poco sobre el acelere de la revolución digital generado por la pandemia.

1. ¿Cómo creés que la pandemia afectó a las pequeñas empresas y los emprendedores? 

La pandemia fue algo inusual. Nadie estaba realmente preparado. Y rompió todas las proyecciones que cualquier PYME o emprendedor podría haber tenido en ese momento en cualquier lugar del mundo. De a poco empezamos a tener todos la sensación de “me está yendo mal, pero a todos les está yendo mal”. Eso era lo único que nos reconfortaba.

Como en toda caída, ocurrió una situación de crisis en la cual necesariamente muchas PYMES y emprendedores necesitaron replantearse mil cosas. Estamos hablando de un tipo de crisis que viene a desafiar el status quo. Lo que a uno le venía pasando durante mucho tiempo con su empresa, de repente cambia y hay que desafiarse a uno mismo para adoptar nuevos paradigmas, nuevos métodos de trabajo y así lograr salir adelante. 

Cambió todo, hasta la educación. Esta revolución llegó para quedarse. 

Entonces, una de las principales cosas que sucedió fue que se aceleraron un montón de procesos de transformación digital en muchos ámbitos. No solo en lo educativo, sino también en lo que tiene que ver con la venta online. Nosotros siempre hablábamos del eCommerce y de su incremento, de que es el futuro, pero era algo que acá en la práctica no funcionaba. Veíamos que, por ejemplo, en Estados Unidos, pagaban con Apple Pay, y acá todavía se usaba mucho el efectivo. Lo que trajo la pandemia fue la aceleración de usos de tecnología. Mercado Pago se transformó en un estándar para poder pagar, y muchos lo prefieren y seguro lo sigan prefiriendo porque es más cómodo, práctico y seguro. 

Las herramientas digitales trajeron nuevos canales de venta a las PYMES y emprendimientos para poder crecer. Un kiosko que solo vendía con atención al público, de repente tuvo que crear su market place y tratar de aprender herramientas digitales para hacer pauta, para así lograr que la gente sepa que ese kiosko te puede entregar un chocolate a las 11 de la noche por una app de pedidos si así se te antoja. 

2. En el contexto actual, ¿cómo ayudan las redes sociales a los negocios pequeños y emprendedores? ¿Qué beneficios les traen? 

Primero hay que aclarar que hay un montón de herramientas digitales que las PYMES tuvieron que entender a la fuerza. Ya no era una opción, sino algo obligado para sobrevivir. Y lo bueno no solo es que digital tuvo y tiene esas herramientas para poder ayudar, sino que muchas empresas lograron acoplarse. 

Además del eCommerce, igualmente, siempre conviene tener redes sociales. Hay que entender que no son tanto el lugar para vender, sino más el lugar para comunicar y construir una comunidad alrededor de una marca. 

Las herramientas que más claramente se refieren a la venta en las redes sociales son las que tienen que ver con poner pautas, como Facebook Ads, por ejemplo. Pero en el día a día, hay que hacer buen contenido, que sea estratégico. Hay que trabajar para que, cuando la gente elige entrar a nuestras redes sociales porque le llegó una publicidad, vea algo interesante y decida quedarse. 

Las redes sirven para que estemos al lado del cliente constantemente y, cuando este necesite un producto, elija el nuestro.

Creo que es importante, y sobre todo hoy. Porque no estamos hablando de hace 7 años cuando la gente dudaba de lo digital. En la actualidad cambió todo y ya no hay nadie que niegue que es importante el mundo digital; por eso hay cada vez más especializaciones y más escuelas que se ponen a trabajar en esto, porque realmente hoy son trabajos que tienen rápida salida laboral. Es un paradigma totalmente distinto del que había antes. Hace unos años era cuestión de tener un título. Hoy estamos en la economía del talento y el que tiene más habilidades es el que puede llegar más lejos. 

Básicamente internet logró conectarnos de maneras grandiosas. Y es una revolución que llegó para quedarse. 

3. Una gran herramienta para pequeñas empresas y emprendedores obtenida de las redes sociales y lo digital es el eCommerce. ¿Por qué es útil? ¿Creés que quienes adoptaron esta herramienta van a seguir o deberían seguir usándola cuando se supere la pandemia? 

El eCommerce es una gran herramienta. La verdad es que hay muchas variables, tanto desde lo mas básico – que puede ser una Tienda Nube o Mercado Libre – hasta opciones más complejas. Hay muchas posibilidades y la realidad es que es fundamental que las PYMES y emprendedores creen su canal. Hoy, por suerte, es muy fácil hacerlo ya que está automatizado. Y los que necesitan una opción más grande, más desarrollada, pueden contratar consultores o profesionales dedicados al eCommerce, que cada vez hay mas, para que les diseñen un plan. 

Sin duda, esto va a seguir creciendo. El futuro es eCommerce. Ya no vamos a ir al supermercado, sino que vamos a hacer las compras por una aplicación. La realidad es que esa es la tendencia mundial, y acá está sucediendo rápidamente por la pandemia. Pero es algo que va a quedar. No hay vuelta atrás. Las personas necesitan y quieren comprar online porque online es más transparente, ya que existe más información para poder tomar decisiones, y eso para el consumidor es importantísimo. 

4. ¿Existen regulaciones en el mundo del eCommerce? 

En realidad, está la ley de defensa del consumidor, que es totalmente aplicable al mundo digital. Pero también hay otra que se ha establecido, que es la de compra protegida. Esta ley obliga a los sitios a tener un botón de “arrepentimiento”. Esto implica que el comprador tenga la posibilidad de devolver el producto si, por ejemplo, no le es útil como esperaba. Obviamente cada sitio tiene su propia reglamentación, como no abrir el paquete, por ejemplo. Lo principal igualmente siempre es que no tiene que estar usado. 

Esta reglamentación me parece muy útil porque ayuda que se regulen las estafas online. 

5. Por último, para vos, ¿la revolución digital es un mundo de “sobrevive el que se adapta”?  

Creo que la revolución avanzó fuerte. Hoy no podemos pensar en pedir una pizza con amigos y que alguien llame a la pizzería para pedirla. Hoy se resuelve todo con un clic. Las PYMES y los emprendimientos tienen que estar ahí. Obvio que pueden seguir con su canal de venta tradicional, pero también tienen que estar ahí, en lo digital. 

Si vos decidís no apostar a las redes sociales porque crees que es un mundo efímero y vos querés otra cosa, está todo bien. Pero seguramente haya alguien que haga lo mismo que vos, que sí apueste a las redes sociales e – independientemente del talento – le va a ir mejor. Hoy por hoy ya no importa la opinión que tenga cada uno con las redes, porque funcionan y hoy sobrevive el más fuerte, el que tiene más habilidades. Ya no sirve quedarse con desarrollar una sola habilidad y decir “yo soy diseñador”. No, tenés que aprender diseño web, redacción, edición de video. Gana el que tiene más habilidades.