Muchos jóvenes argentinos nos encontramos en algún momento de nuestras vidas con una duda existencial: ¿me voy o me quedo? Para aportar a este dilema, exploramos las historias de aquellos que, impulsados por la búsqueda de un futuro mejor, decidieron romper fronteras y lanzarse a lo desconocido.
Por: Josefina Aragonés
En un momento de agitación política, incertidumbre económica y malestar generalizado, muchos jóvenes argentinos consideran la opción de emigrar en busca de un futuro más estable y prometedor. Pero esta no es una historia nueva. En las últimas décadas, un número creciente de argentinos decide aventurarse más allá de las fronteras de su patria, buscando nuevas experiencias, desafíos emocionantes y, casi siempre, una mejor calidad de vida.
En esta nota, vamos a explorar las experiencias de 7 jóvenes viviendo en el extranjero, que nos contaron los motivos detrás de esta gran decisión, y detallaron lo mejor y lo peor de emigrar desde su punto de vista. ¿El objetivo? Tener una visión amplia de lo que implica partir de Argentina, y aportar al análisis de aquellos que están leyendo esta nota con la idea de intentarlo. Para guiar los testimonios, les pedimos a los chicos que se basaran en su historia (1), los pros de emigrar (2) y las contras de emigrar (3).
Juan – España
- Mi nombre es Juan Gnarra, tengo 31 años y vine a España en 2020 con el objetivo de hacer una experiencia de un año. La razón fue que me despertaba curiosidad animarme a ponerme en la situación de lo desconocido para incomodarme y ver qué cosas nuevas de mi personalidad podía encontrar.
- Los pros de vivir en España:
– Valorar de donde vengo, mi familia, amigos y en base a esto vivir mucho más presente. Al no tenerlos y vivir con eso, sé que cada cosa que hago va pasar y en un tiempo no la voy a tener, por lo que intento valorarla al máximo.
– No permitir quedarme estancado. Se que esto no va durar para siempre y que voy a volver a mi país, así que tengo cierto impulso que me acompaña a “activar”, cosa que tal vez en mi país estaba un poco más cómodo.
– Conocer distintos estilos de vida para absorber información. Darme cuenta de que la queja va más allá de la problemática y es una forma de encarar los problemas. En España se quejan de lo mismo que nos quejamos en Argentina y tienen el 10 % de los problemas que tenemos en Argentina.
– Descubrir también que tengo habilidades sociales que tal vez antes no las había puesto en práctica. - Los contras de vivir España:
– El racismo y el no sentirme parte del país. La falta de sentido de pertenencia. Mi vida se tornó mucho más para mí y no tanto para la sociedad.
– Vivir con el miedo de que le pase algo a alguno de los tuyos y no estar o no haber compartido sus últimos momentos.
– Ver crecer a tu familia y estar lejos. Perderte el día a día y momentos importantes de gente a la cual aprecias.
– Cada experiencia es única. Está es una porción muy chica de mi emigración. Una experiencia muy nutritiva y difícil. De todas maneras, la recomiendo. Salud!
Vicky – Holanda
- Me vine a Ámsterdam en febrero de 2019. La historia es así: estaba de viaje con mi ex novio (que ya era mi ex, otra historia medio loca) cuando me crucé con un hostel en Ámsterdam donde conocí un par de voluntarios de todo el mundo que trabajaban en el hostel a cambio de acomodamiento. En principio yo me tenía que volver a Argentina al final del viaje, pero empecé a preguntar y averiguar y cuando me quería acordar me había conseguido un lugar como voluntaria en el hostel. Y así empezó mi aventura, me quedé en el hostel, donde trabajé y viví un par de meses, y gracias a ese lugar encontré un cuarto en una casa unos meses después. Ahora ya van 5 años que vivo en Holanda, pasé por muchos trabajos, casas, relaciones y amigos y todavía le agradezco a mi yo de 20 añitos que se animó a jugársela y ver que pasaba.
- Los pros de vivir en Holanda:
– Siempre me gustó la idea de vivir en una comunidad internacional, por lo que Holanda para mi fue perfecto en ese sentido.
– Viví y trabajé con gente de todo el mundo, aprendí de culturas que nunca hubiera conocido y más que nada aprendí que somos todos más parecidos de lo que creemos. Conocer a alguien de la otra punta del mundo y conectar como si fueran hermanos, habiendo crecido con culturas e idiomas diferentes. - Los contras de vivir en Holanda:
– Es normal sentirse solo ya que no contás con tu familia y amigos todo el tiempo, hay momentos difíciles en los que sentís que nadie te acompaña y que todo se desmorona, es fácil sentir que todo se te viene encima.
– Financieramente también puede ser un estrés, ya que los costos de vida son súper altos y si calculas mal quizás te pasas todo el mes comiendo arroz.
– Pero bueno, de todo se aprende y es todo parte de la experiencia, yo personalmente a pesar de todo eso no me arrepiento y creo que me al final me hizo más fuerte
Elías – México
- Elias, 26 años, mitad varelense mitad porteño. Desde los 20 años vivo en Capital con mi novio pero a nuestros 25 decidimos concretar la experiencia de vivir en otro país. No tanto por una necesidad económica ni por falta de oportunidades, sino por un interés personal de conocer distintas culturas. Ahorramos pocos meses en Argentina y viajamos a México, ambos con una propuesta laboral fija que contactamos por redes. Al principio la pasé muy bien por conocer lo desconocido. Pero al tiempo empecé a extrañar mucho vivir en Argentina. A los meses por un tema personal tuve que volver con la idea de que sean solo dos meses pero al llegar me dí cuenta que no quería irme de vuelta. Terapia de por medio, entendí que uno se tiene que hacer cargo de los deseos y sus costos, asique decidí aceptar que soy de esos argentinos densos que defienden la idea de que está piola vivir acá, con nuestros problemas pero también con nuestras alegrías (que son muchas).
- Pros de vivir en México:
– Conoces la cultura del lugar
– Conocer personas de todo el mundo
– Salís de tu zona de confort - Contras de vivir en México:
– México es machista y homofóbico
– Violencia de narcos y policía
– La accesibilidad a la salud y educación
Florencia – Canadá
- Me fui a Whistler, Canadá en diciembre del 2017. Todo empezó desde chica cuando me iba de vacaciones con mi familia y primos al sur los veranos e inviernos. Ahí conocí la montaña y la vida en la naturaleza. Cuando estaba en la universidad me fui dos inviernos de work and travel a Vail y confirmé que quería vivir cerca de la montaña. Entonces seguí investigando en centros de esquí en Europa y USA y se me complicaba el tema VISA. Hasta que un día una amiga me dijo “averiguaste Whistler en Canadá?” Nunca se me había cruzado por la cabeza Canada, ni había escuchado acerca de Whistler. Así que me puse a averiguar y me cerró por todos lados! Un resort de montaña con turismo todo el año, eventos y activaciones de marca internacionales. Mudarme a otro país no me fue difícil al principio ya que yo me sentía bastante asfixiada en Buenos Aires, no viviendo mi estilo de vida. Por suerte enseguida me hice amigos. Me costó más después de unos años ya que la distancia y el extrañar para mí cada vez es más difícil. Hace dos años conocí un grupito de argentinos donde me encanta compartir nuestras tradiciones para no perder nuestra identidad: mates, asados sobre el lago, etc.
- Los pros de vivir en Canadá:
– Vivir en Whistler me dio la oprtunidad de conocer miles de estilos de vida, costumbres y formas de ver las cosas, y de decidir como yo quiero vivir. Aca en whistler específicamente hay gente de todo el mundo: australia, nueva zelanda, franceses, Chekoslovakia, Slovakia, Canadá, USA, México, Colombia, Chile mayormente. Y la gente rota por temporada salvo los que deciden quedarse, asique conocer gente constantemente con diferentes visiones de la vida me vuela la cabeza!
– También me gusta la seguridad de vivir acá. Por más de que no haya inseguridad, hay ‘wildlife’ jaja pero no siento la preocupación de robos y siento que mi estilo de vida es más fácil y sustentable que en buenos aires. No tengo que agarrar el auto para todo y/o estancarme en el tráfico. - Los contras de vivir en Canadá:
– Me cuesta muchísimo conectar un buen momento para llamadas con amigas y familia. Pero por suerte con los años le fui encontrando la vuelta aunque hay amigas que me gustaría poder conectar mas la verdad aunque como visito todos los años argentina a veces es como si el tiempo no pasara, pero a veces sí!
– A veces me angustia mucho no vivir el día a día. A veces una charla por FaceTime me hace sentir a mis seres queridos muy muy cerca y a veces cuando no coincido por unas semanas me hace sentir la distancia bastante fuerte.
Juani – Irlanda
- Emigre de Argentina en abril de 2022. La razón era pura y exclusivamente por experiencia. El plan era irme con mi mejor amigo a Dinamarca unos meses, ganar cierta cantidad de plata y volver. Cuando llegue a Copenhagen, tenía que esperar a mi amigo haciendo los papeles en Italia y por cuestiones burocráticas, los papeles a mi amigo nunca le salieron y un viaje planeado entre dos, terminó siendo un viaje para mi solo en un país realmente muy diferente. El idioma, el clima y la diferencia cultural hacen que emigrar solo a Dinamarca sea un tema difícil y en mi experiencia llegué a pasarla muy mal, principalmente por el idioma, que a mi entender fue la barrera más grande en Dinamarca. Finalmente en septiembre logré conseguir trabajo en Irlanda, en el área de legales de Meta así que la vida me terminó mudando ahí. Irlanda fue otra historia. La amabilidad y lo amigable que es la gente, el idioma el cual uno maneja abre muchas más puertas y la vida es mucho más parecida a la cual nosotros estamos acostumbrados y la comodidad de trabajar donde a uno realmente le gusta. Ahora ya llevo en Irlanda más de un año y estoy muy feliz de estar acá.
- Pros de vivir en Irlanda:
– Creo que se enfocan solamente en la calidad de vida y nada más. Eso incluye la cuestión económica, seguridad y capacidad de progresar. La diferencia con Argentina es abismal en ese sentido. Uno realmente puede planear a largo plazo sin miedo al qué pasará en la mitad. Pero dejando de lado la calidad de vida, no hay nada como Argentina. Lejos de ser una cuestión patriótica sino es porque es donde uno se crió y tiene su vida. - Contras de vivir en Irlanda:
– La gran contra de vivir afuera, es que uno espera o se imagina poder armar una vida en su nuevo país, pero eso es realmente imposible. Uno tiene una vida armada en la argentina, con sus amigos y familia, y por más que conozcas a quien conozcas nunca vas a poder reemplazarlos. En mi caso, la gran mayoría de mis amigos son relaciones de hace 20 años. Es realmente muy difícil reemplazar una relación tan larga y con tanta confianza de por medio. Hay un momento donde uno entiende que una parte de uno se queda en la argentina y eso nunca va a cambiar. Para emigrar al exterior hay que aceptar el hecho de que uno nunca puede dejar Argentina y estar feliz de eso. Por lo menos desde mi lugar, nunca le cierro las puertas a volver.
Guadalupe – España
- Soy Guadalupe, tengo 30 años y emigré el 7/11/2020. Me fui a Barcelona, España. El motivo del viaje era hacer una experiencia de vida afuera del país. A qué, no lo tenía claro. Emigré en pareja, y desde que llegamos cambiaron los planes. Aterrizamos en Barcelona creyendo que nos quedábamos acá y a las 6 horas ya nos estábamos moviendo al sur de España donde estuvimos los primeros casi 5 meses haciendo voluntariado a cambio de hospedaje. Sin tiempo ni rumbo, giramos bastante hasta volver a Barcelona, lugar donde seguimos hoy casi 3 años después. Sería imposible poner en palabras como todo mutó y fue evolucionando, pero sin lugar a dudas una de las experiencias más trascendentales de la vida.
- Los pros de vivir en España:
– Mucho trabajo personal, de estar sola, salir de mi zona de confort, de meterme en otra cultura laboralmente…
– Obviamente hay una mejor calidad de vida en cuanto a que quizá no estás como en argentina pensando siempre en la economía y podes darte otros lujos materiales sin sufrir, podes ahorrar, viajar y proyectar. Pero hay mucho mito también sobre esto. Al menos España económicamente no es de los mejores países a nivel económico.
– Podes tomarte un avión y en 2 días recorrer otra ciudad, podés irte a playas paradisíacas o a un centro de esquí a pasar el día.
– Me animo a estar sola a cualquier hora en la calle, y esa libertad es impagable.
– Hay mucha más diversidad a nivel cultural y de todo tipo. Eso te abre la cabeza muchísimo. - Los contras de vivir en España:
– La mayor contra es que estas lejos de los tuyos, si bien justo en Barcelona hay una argentinidad latente constante, los tuyos no están. Y al final, siempre me pregunto lo mismo, buenísima toda la calidad de vida, pero al final no podemos compartirlo con los nuestros, y eso duele mucho.
– La cultura catalana es muy cerrada, trabajan súper diferente, tienen otros chistes, valores, etc .
En estas historias de argentinos que decidieron emigrar, se revelan múltiples capas de experiencias, desafíos y descubrimientos. Cada relato es una ventana a la complejidad de la búsqueda de un futuro mejor, con sus altibajos: una riqueza inigualable de aprendizajes y calidad de vida, acompañada de una soledad y nostalgia latente. A partir de ellos, entendemos el emigrar como un acto valiente que despierta la conciencia sobre la propia identidad, la apreciación de lo que se deja atrás y la adaptación a nuevos entornos.
En última instancia, estas historias no solo son crónicas individuales, sino también testimonios colectivos que reflejan la universalidad de las aspiraciones humanas. Más allá de las fronteras geográficas y de las situaciones políticas de cada país, todos compartimos el anhelo de crecimiento, conexión y significado. La emigración se convierte así en un viaje no solo hacia nuevos lugares, sino hacia la comprensión más profunda de nosotros mismos y de lo que realmente valoramos en la vida. Tal vez, emigrar no sea para todos. La pregunta es: ¿es para vos?