El té chai es una infusión originaria de la India que empezó a esparcirse por todo el mundo en los últimos años. Lo ofrecen en los cafés más gourmet o internacionales pero muy pocos saben realmente en qué consiste esta bebida que es ideal para una compañía calentita en la época otoñal.

Se trata de una base de té negro o verde que se acompaña de especias como canela, clavo de olor, jenjibre, cardamomo, nuez moscada y vainilla, entre varias otras. Varía mucho dependiendo de los gustos de cada uno. Puede servirse solo o con leche (se suele utilizar mucho la leche de almendras) y algunos también deciden endulzarlo. Lo que tiene de positivo es que, además de ser muy sabroso, las especias lo benefician con una serie de propiedades medicinales. Es por eso que el té chai suele ser digestivo, anti-inflamatorio, anti-oxidante y beneficioso para aquellos con problemas cardiovasculares y respiratorios.

 

INGREDIENTES (para 4 tazas):

  • 2 tazas de agua
  • 2 saquitos de té negro
  • 2 clavos de olor
  • 1 cdita. de canela en polvo
  • 1/2 cdita. de jenjibre en polvo
  • 1/2 cdita. de cardamomo en polvo
  • 1/2 cdita. de nuez moscada en polvo
  • 1/4 cdita. de extracto de vainilla
  • 1 cda. de miel
  • 3/4 taza de leche de almendras
  • 1 pizca de canela

PREPARACIÓN:

En una olla mediana, llevar el agua a hervor junto con las especias y mientras ir revolviendo. Una vez que el agua haya hervido, apagar el fuego y dejar que las especias reposen en el agua unos 5 minutos. Luego, encender el fuego y agregar los saquitos de té y la miel. Esperar a que vuelva a hervir y volver a apagar el fuego.

Dejar todo reposar unos 5 minutos. Luego, retirar los saquitos de té y pasar el agua con las especias por un colador para sacar los restos.

En otra olla, calentar la leche junto con la canela hasta que hierva (revolver mientras tanto). Una vez lista, volcarla junto con el té, decorarlo con un poco más de canela y disfrutarlo calentito.